A PESAR DE LA HERENCIA Y LOS MOMENTOS VIVIDOS..
Levántate y anda parece ser el mandato divino, pero es fútbol y si bien la mística es un componente de alta gravitación, la cosa es más terrenal de lo pensado.
La Crema juega este torneo con el severo condicionamiento de un legado espantoso desde lo deportivo e institucional, una formula letal, una combinación conspirativa que no debe perderse de vista ni siquiera en momentos deportivamente felices.
Un indeseable compañero de viaje al que no hay mas remedio que aceptar para que la memoria permanezca activa y alerta.
El tipo está ahi, viaja con vos, es silencioso y no parece estar dispuesto a bajarse por un tiempo largo.
La puta herencia es el gran rival; todos lo saben o deberían, no para fogonear rencores, en todo caso es un saludable ejercicio que le da tono a la realidad y necesita generar anticuerpos, que solo vos, hincha de Atlético, podés conseguir.
Por estas horas el alma ha retornado al cuerpo y la palabra dignidad, suena armónica, pero falta mucho y acaso no alcance, sin embargo, la sensación de buenos vientos y ventanas abiertas, va mejorando la calidad de vida del simpatizante y también de todos los que nos involucramos profesionalmente.
Y si alcanza con este rebrote de esperanza, cuanto mejor, al fin y al cabo, todos auguramos un final feliz pese al despilfarro y a la improvisación que dejaron a éste querido club, al borde del abismo.